Ronald Araujo fue incluido inicialmente en el equipo B del Barça tras incorporarse a los 19 años, pero no tardó en irrumpir en el primer equipo de Ernesto Valverde.
Está claro que el uruguayo es un defensa especial y su debut ante el Vigo Celta ya fue reconocido por la afición. Araujo, de 6 pies y 6 pulgadas, es una máquina, y su coeficiente intelectual defensivo siempre ha estado más allá de su edad, especialmente en situaciones de 1 contra 1.
Lo único que lo retrasó un par de veces fue su manejo de la pelota.
A menudo lo han relegado a la banca para apoyar a otros jugadores, incluso la temporada pasada, porque no se sentía particularmente cómodo con el balón.
Sin embargo, su mejora, especialmente esta temporada, es evidente para todos. Araujo publicó esto, citando a Veronica Brunati:
“Cuando llegué al Barça, toqué tres veces el balón y perdí tres veces. Me molesta. Creo que podría mejorar trabajando duro. »
«Me quedo atrás y entreno, en el campo, controlo y paso, controlo y paso, y si entrenamos por la mañana, él vuelve a entrenar solo por la tarde», explicó Araujo sobre cómo supera su «debilidad». »
El jugador de 23 años también es más asertivo ahora, y se nota cuando intenta hacer pases más atrevidos y, en ocasiones, lleva el balón al centro del campo.
Para el contexto, Araujo ha completado 3.4 pases largos con una tasa de éxito del 55% y 2.5 pases cortos con una tasa de éxito del 50% esta temporada. Al final de la temporada pasada, esos números eran 2.8 (52 por ciento) y 1.2 (43 por ciento).
Aunque no sea Andreas Christensen o Erik García, está claro que el entrenamiento de Araujo está dando sus frutos. Se ha establecido en la línea de fondo de Barcelona junto a Gilles Kunder y ha hecho ocho apariciones esta temporada con seis errores asombrosos.